/

GOBIERNO Y CULTURA: EL CULTO DE LA MUERTE (ALGO MALO PASA)

A los veteranos memoriosos no les resultará difícil traer a la superficie el recuerdo de la película "Brazil" del grupo Monthy Piton. De sus anticipaciones, aunque algo le deba a "1984" de George Orwell recordamos las sucesivas escenas de la madre del protagonista, la que -tras sucesivas operaciones estéticas- termina licuada en un sarcófago que la expulsa en medio de una sórdida pelea, derramándola por el suelo. Una metáfora del reciclado político y moral. Si alguno percibe un parentesco cercano de este recuento con el pasado, el presente y el futuro político de Nacha Guevara (al parecer nacida Clotilde Acosta) habrá dado en el clavo: De "calentar" los 70 al justificado raje de los 80, hasta la propaganda "new age" de los 90 (pasamos de copiar "la izquierda divina", a propagandear los juguetitos de la derecha millonaria norteamericana), para recalar en este principio de milenio con el grupo de los "transversales". De una zoncera colonial a otra, pero siempre colgada del mismo hilo. Una metáfora de la indignidad de los políticos. La la ex -compañera Clotilde ha recalado en el Fondo Nacional de las Artes. Desconocemos cual es su capacidad de gestión al frente de un organismo cultural (no es lo mismo actuar en un Cabaret que administrar el Teatro), aunque, justo es decirlo, muchos de quienes la precedieron en el cargo y que sobrevivían desde la época del prófugo trasandino, militaban en el mismo rubro, y su fracaso, más allá del mal que causaron (intrascendencia e improductividad de los fondos públicos aplicados a la gestión cultural) no le interesaron a nadie. Un punto a favor de la próxima derrota de la nueva (¿compañera?) codirectora del F.N.A.

Un extraditado de este Organismo y de la Biblioteca Nacional, Horacio Salas, cedió el paso, luego de jugar de "transversal" al argen-mex Vitale cuya gestión más conocida en el medio libresco-cultural fue la administración de la Librería Ghandi. Al aceptar el cargo ¿creerá que la Biblioteca Nacional es una librería más grande?. Hay un punto a su favor: a la B.N. no pueden fundirla, solamente destruirla.

En la "escala de los seres", dejamos para el final a quien encabeza literalmente a este grupo de prófugos del pasado: al sociólogo-humanista-antiperonista GUIDO DI TELLA Secretario de Cultura de la Nación, ejecutor de esta falta de política de estado en el campo de la cultura. A un año de gestión, no ha logrado superar el espacio territorial de Barrio Norte, ya que el resto es producto inercial de la gestión del duhaldismo. Quien pasa por ser un intelectual de grueso calibre (aunque late la sospecha de que ya ha sido descubierto), teorizador de la "teoría del rabanito" para definir científica pero popularmente al peronismo (rojo por afuera, blanco por adentro) cuya frase de cabecera es: "no sé lo que vamos a hacer" hace que el pre-universitario Lopérfido aparezca como un hiperkinético (de la nada, pero al menos entretenía a los giles).

La "transversalidad" ha logrado de este modo una sumatoria de aspectos del menemismo (por su falta de interés en la cultura nacional) de la frustrada Alianza (artistas del vacío) y de Piñón Fijo (lo más rescatable) ya que al menos le pone un toque de gracia infantil, aunque su trivialidad sorprenda a los adultos.

Nota Anterior

HANNA ARENDT, ELISA CARRIO, LOS NAZIS "MALOS" Y LA ARGENTINA COLONIAL

Nota Siguiente

AVANCES: "Revolución en la lectura. El discurso periodístico-literario de las primeras revistas ilustradas rioplatenses"

Lo último de Cultura

SOBRE UNA ESTETICA NACIONAL

Kuki Shuzo (*): “ La estructura del Iki” (**) Superado el “orientalismo” (“japonería” incluida) del modernismo